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Sal amoniacal o salmiac

La sal amoniacal, también conocida como cloruro de amonio, es un compuesto químico con la fórmula NH4Cl. Es un sólido cristalino blanco o azul que se disuelve fácilmente en agua. La sal amoniacal tiene un sabor salado y amargo y un olor característico a amoníaco.

La sal amoniacal se encuentra en la naturaleza en forma de depósitos minerales. También se produce artificialmente mediante la reacción del amoníaco con el ácido clorhídrico. Los cristales están muy bien formados y son translúcidos. Tiene un maravilloso color azul turquesa y un brillo ceroso. La sal amoniacal tiene una amplia variedad de usos, incluyendo la fabricación de fertilizantes, la producción de metales, la limpieza de metales y la fabricación de baterías.

La sal amoniacal en la historia

Desde tiempos antiguos, el salmiac, con sus sinónimos sal amoníaco y sal amoniacal, ha sido parte de la historia de la humanidad. Ya en la Roma clásica, el naturalista Plinio hizo referencia a una sal denominada sal Hamoniaco, proveniente de zonas áridas de África. A pesar de su sabor desagradable, esta sustancia se valoraba por sus propiedades medicinales. Si bien no podemos afirmar con certeza que la sal Hamoniaco sea idéntica al salmiac actual, es indudable que esta antigua sal desempeñó un papel fundamental en la etimología de los términos amoníaco y amonio.

Históricamente, la sal amoniacal se extraía de yacimientos naturales, especialmente en la cuenca de Tarím. Posteriormente, se obtuvo de la evaporación de desechos animales, una práctica común en regiones áridas como Egipto. En Europa, se adoptaron métodos similares, pero a partir del siglo XVII se comenzó a producir localmente a partir de hollines industriales. Sin embargo, la producción a gran escala llegó con la utilización de los gases amoniacales liberados en la destilación del carbón, que al reaccionar con ácido clorhídrico daban lugar a la sal amoniacal.

Propiedades físicas y químicas

La sal amoniacal es un sólido cristalino azul que se disuelve fácilmente en agua. Tiene un punto de fusión de 338 °C y un punto de ebullición de 339 °C. La sal amoniacal es un buen conductor de la electricidad y tiene una conductividad térmica relativamente alta.

La sal amoniacal es un compuesto iónico, lo que significa que está formado por iones positivos y negativos. Los iones positivos son los iones de amonio (NH4+) y los iones negativos son los iones de cloruro (Cl-). Los iones de amonio son iones poliatómicos, lo que significa que están formados por más de un átomo.

La sal amoniacal es un compuesto estable, pero puede descomponerse en amoníaco y ácido clorhídrico cuando se calienta a altas temperaturas. También puede reaccionar con bases fuertes para formar amoníaco y agua.

La sal amoniacal: un compuesto de orígenes diversos

La sal amoniacal, o cloruro de amonio (NH₄Cl), es un compuesto químico que se encuentra tanto en la naturaleza como producido por el ser humano. Su formación es un proceso fascinante que involucra una serie de reacciones químicas y condiciones ambientales específicas.

Formación natural:

  • Actividad volcánica: En las entrañas de la Tierra, donde la actividad volcánica es intensa, se producen gases ricos en compuestos de amonio y cloro. Al ascender a la superficie, estos gases se enfrían y entran en contacto con el aire, lo que favorece la combinación de los iones de amonio (NH₄⁺) y cloruro (Cl⁻) para formar cristales de sal amoniacal. Estos cristales a menudo se depositan alrededor de fumarolas volcánicas, en grietas y cavidades, y en los flujos de lava.

  • Descomposición de materia orgánica: En lugares donde se acumulan grandes cantidades de materia orgánica en descomposición, como en los depósitos de guano de aves marinas, se producen procesos de putrefacción que liberan amoníaco. Si este amoníaco entra en contacto con compuestos clorados presentes en el entorno, puede formarse sal amoniacal.

  • Incendios forestales y de carbón: Los incendios de gran magnitud, ya sean forestales o en yacimientos de carbón, generan altas temperaturas que favorecen la liberación de compuestos nitrogenados y clorados. Al enfriarse los gases producto de la combustión, se pueden formar cristales de sal amoniacal.

Formación artificial:

  • Proceso Solvay: Históricamente, uno de los métodos más importantes para la producción industrial de sal amoniacal fue el proceso Solvay. En este proceso, se hacía reaccionar el cloruro de sodio (sal común) con amoníaco y dióxido de carbono para obtener carbonato de sodio. Como subproducto de esta reacción, se obtenía cloruro de amonio.

  • Síntesis directa: Actualmente, la forma más común de producir sal amoniacal a escala industrial es mediante la reacción directa entre el amoníaco gaseoso y el ácido clorhídrico gaseoso. Esta reacción es altamente exotérmica y produce cristales de sal amoniacal de alta pureza.

  • Sublimación: La sublimación es otro método utilizado para obtener sal amoniacal de alta pureza. Consiste en calentar cloruro de amonio sólido hasta que se sublima, es decir, pasa directamente del estado sólido al gaseoso. Al enfriar el vapor, se obtienen cristales puros.

Usos

La sal amoniacal tiene una amplia variedad de usos, incluyendo:

  • Fertilizantes: La sal amoniacal es un excelente fertilizante nitrogenado. El nitrógeno es un nutriente esencial para el crecimiento de las plantas. La sal amoniacal se puede aplicar al suelo como fertilizante sólido o como solución líquida.

  • Producción de metales: La sal amoniacal se utiliza en la producción de metales para limpiar los metales y para mejorar la calidad de los metales.

  • Limpieza de metales: La sal amoniacal se utiliza para limpiar los metales de la corrosión y de otros contaminantes.

  • Fabricación de baterías: La sal amoniacal se utiliza en la fabricación de baterías de zinc-cloruro.

  • Otros usos: La sal amoniacal se utiliza en la fabricación de productos químicos, en la industria alimentaria y en la industria farmacéutica.

Seguridad

La sal amoniacal es un compuesto seguro cuando se utiliza correctamente. Sin embargo, puede ser irritante para los ojos, la piel y las vías respiratorias. Es importante usar guantes y protección para los ojos cuando se maneja sal amoniacal

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