Zubenelchamali (α Librae): Situada en el otro extremo de la balanza, Zubenelchamali significa "pinza del norte". Al igual que Zubenelgenubi, es un sistema estelar binario. La componente principal es una estrella blanca, mientras que la secundaria es una enana blanca. Esta estrella es particularmente interesante porque se encuentra muy cerca de la eclíptica, la trayectoria aparente del Sol a través del cielo. Zubenelgenubi está cerca de la eclíptica y puede ser ocultada por la luna y a veces por planetas.
Brachium (σ Librae): Significa "brazo" en latín y es una gigante roja situada a unos 79,75 años luz de la Tierra. Con una magnitud aparente de 3,21, es visible a simple vista, pero no se encuentra entre las más brillantes de Libra.
Ípsilon Librae (υ Librae): Su nombre deriva simplemente de la letra griega "upsilon" utilizada en su designación astronómica. Es una gigante naranja a 224 años luz de distancia, con una magnitud aparente de 3,61.
Tau Librae (τ Librae): Otra estrella sin un nombre mitológico o histórico asociado. Se trata de una gigante naranja a aproximadamente 440 años luz del Sistema Solar. Su brillo es más tenue que las anteriores, con una magnitud aparente de 4,27.
Zubenelakrab (γ Librae): El nombre árabe "Zuben el Akrab" se traduce como "la garra del escorpión", aunque actualmente se encuentra dentro de los límites de Libra. Es un sistema binario compuesto por dos estrellas: una gigante naranja y una enana blanca. La gigante tiene una magnitud aparente de 3,91 y se localiza a unos 152 años luz de distancia.
La referencia más antigua que se tiene de Libra proviene de los babilonios, quienes la llamaban "MUL.ZIB.BA.AN.NA", que significa "la balanza del cielo". Esta constelación se encontraba en la "ruta de Anu", el dios del cielo, junto a Tauro (el toro) y Orión (el cazador). Si bien no hay un mito específico, la asociación con una balanza podría estar relacionada con la época en la que el Sol cruzaba esta constelación durante el equinoccio de otoño (alrededor del 23 de septiembre). En ese momento, el día y la noche tienen una duración similar, simbolizando un equilibrio perfecto, representado por la balanza. Es posible que para los babilonios, expertos astrónomos de la antigüedad, la constelación de Libra marcara un periodo de balance y justicia en la naturaleza, reflejando la influencia de Shamash, el dios del sol, quien también era asociado con la verdad y la justicia.
Mitología Romana
Históricamente, la constelación de Libra ha tenido una evolución fascinante. Inicialmente, en la Antigua Grecia, las estrellas que hoy conforman Libra eran consideradas parte de las pinzas del Escorpión, reflejando su asociación con la fuerza y el poder. Sin embargo, con el tiempo, se estableció una conexión entre estas estrellas y conceptos más abstractos como la ley, la justicia y el civismo. Esta asociación se fortaleció debido a la posición del Sol en esta región del cielo durante el equinoccio de otoño, un momento en el que el día y la noche tienen la misma duración, simbolizando el equilibrio y la imparcialidad.
Mitologia egipcia
En la antigüedad egipcia, las tres estrellas más luminosas de la constelación de Libra eran percibidas como una embarcación. A diferencia de otras agrupaciones estelares, Libra no figura en los registros de Eudoxo ni Arato. Sin embargo, su existencia es mencionada por Manetón en el siglo III antes de Cristo y por Geminos en el siglo I antes de Cristo. Ptolomeo, en su catálogo de 48 asterismos, incluye a Libra y le asigna 17 estrellas, mientras que Tycho Brahe la compone de 10 y Johannes Hevelius de 20. Curiosamente
Cuando miran la constelación de Libra, lo primero que verían sería en Zubenelgenubi la tercera mansión lunar, en total son 28, y esta mansión es conocida como Di donde tiene a dos concubinas y la emperatriz. Entre Teta y 48 Librae forman una línea que se une a otras dos estrellitas más, que son parte de la constelación de Escorpión, estos forman Sisian, que es el sitio donde castigan a los infractores de las normas comerciales, como la alteración de las pesas o las estafas. Al sur de Libra se encuentra Zenche, que es donde se encuentran guardados los carros de batalla. Justo al lado tenemos a Tianfu, donde se guardan los radios de las ruedas de repuesto de los carros por si toca cambiarlos, todo muy práctico. Tenemos luego a una estrella que llaman Ri, no se sabe exactamente qué estrella es, podría ser Capa Librae o tal vez una de Escorpio y esta Ri es la estrella del Sol, porque es la opuesta de la estrella de la Luna que está situada en Tauro y que cuenta con una antigua leyenda. Entre Libra y Virgo sin saber exactamente qué estrellas son estaría Canchí que es un lago con barcas.
Objetos del cielo profundo en Libra:
Cúmulos globulares:
NGC 5897: Este es probablemente el objeto de cielo profundo más conocido de Libra. Se trata de un cúmulo globular relativamente brillante y fácil de observar con telescopios de tamaño moderado. Su apariencia es la de una esfera de estrellas densamente empaquetadas. Se encuentra en la parte más externa de nuestra galaxia, a una distancia de 12.500 pársecs, y tiene muy pocos metales. Se cree que nació de los restos de una galaxia más antigua (llamada Gaia-Enceladus) que se unió a la Vía Láctea hace unos 10.000 millones de años."
Galaxias:
NGC 5728: Una galaxia espiral situada al suroeste de Zubenelgenubi (α Librae). Aunque no es tan brillante como otros objetos, ofrece una vista interesante para quienes dispongan de telescopios más potentes.
NGC 5792: Se trata de una galaxia espiral situada a una distancia de 31,7 millones de pársecs de nuestro sistema solar. En el espectro de luz visible, exhibe una estructura compuesta por un pseudoanillo exterior con un radio de 31 500 pársecs y un anillo interior de 10 800 pársecs.
En la constelación de Libra encontramos el Grupo de Galaxias NGC 5903, una agrupación de alrededor de treinta galaxias. Este grupo está dominado por dos grandes galaxias elípticas: NGC 5903 y NGC 5898. Estas galaxias, a pesar de su tamaño y apariencia actual, conservan evidencias de un pasado activo, marcado por múltiples fusiones y interacciones con otras galaxias. El sistema formado por NGC 5903 y NGC 5898 nos ofrece una ventana a las últimas etapas de la evolución de un grupo de galaxias.
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